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lunes, 2 de abril de 2018

El paraguayo que fue multimillonario y un dia lo perdió todo


Mercedes Ramón Negrete es el nombre de un paraguayo que en abril de 1972 ganó una fortuna en el juego de apuestas deportivas de Argentina Prode. Con lo que en la actualidad serían unos US$ 30 millones, logró incluso la fama, pero lo perdió todo.


La historia de un paraguayo es nuevamente noticia en el país vecino a través del periodista Carlos Manzoni, del diario La Nación de Argentina. El texto narra cómo el paraguayo Mercedes Ramón Negrete, hace 46 años, se volvió multimillonario al acertar el resultado de 13 partidos de fútbol en una apuesta deportiva llamada Prode.

Negrete trabajaba como empleado textil y vivía en Villa Domínico, Argentina, desde 1969 con un salario de 50.000 pesos y jamás imaginó que de la noche a la mañana se volvería millonario con una suerte que valdría 391.437.948 en ese entonces, lo que ahora equivale a unos US$ 30 millones, convirtiéndose en el primer ganador de este juego, que recientemente fue suspendido por el Gobierno, detalla la publicación argentina.

El entonces joven de 26 años alcanzó la fama tras su fortuna repentina y fue invitado a varios programas de televisión, de radio y hasta incluso se reunió con  directivos del Banco Nación para depositar allí su fortuna.

Sin embargo, uno de los hechos que más captaron la atención de los argentinos es que tras este episodio de suerte dejó a su novia Fabiana López, por lo que empezó a ser conocida como la “Perdedora del Prode”. Varios medios de comunicación se hicieron eco de lo sucedido con Fabiana, a quien -tras la presión existente- Negrete finalmente cedió unos 17 millones de pesos.

El destino de Fabiana, que tanto caló en los argentinos, fue luego incluido en una serie de televisión denominada “Los Campanelli”, que tenía un estilo de comedia. También inspiró una película argentina en 1973 llamada: "Yo gané el Prode, ¿y usted?”.

Luego, Negrete decidió volver a Paraguay y compró terrenos en Humaitá. Hoy, a sus 71 años, vive en Pilar; aún le queda una antigua camioneta Chevrolet y tiene en su poder unas cuantas hectáreas, donde cría bueyes para sobrevivir y se moviliza constantemente entre ambas ciudades.

¿Qué pasó con su fortuna? Dicen los rumores que la perdió apostando en carreras, jugando a las cartas, derrochando en bebidas y tomando malas decisiones económicas.

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